Giancarlo asegura a Antonia que conoce las intenciones de los secuestradores de Pietro: pretenden intercambiar a su padre por él… y está dispuesto a asumirlo. Al mismo tiempo, comprobamos su verdadera relación con Calcaterra.

Después de que Emiliano le confiese a Fermín que Rodrigo es su hijo, este quiere todos los detalles sobre su relación con Pepita… Emiliano se sincera: fue y es una historia muy especial… su gran amor.

Iván chantajea a Maruja pero esta es incapaz de cumplir con los plazos que su hijo le exige a cambio de su silencio. Maruja comparte la situación con César, que está convencido de que puede manejarlo.

Fermín sigue los consejos de Emiliano y le revela a Lázara que ha estado hurgando en su pasado… al mismo tiempo que se disculpa con ella, la mujer finge sentirse dolida.

Laurita está pendiente de comunicarse con Celia después de saber que vuelve a Madrid. Inés se interesa por ello… pero, ¿Con qué interés? Es posible que esa relación sea su as bajo la manga para terminar con la carrera de su hermana.

Paula, ahora que conoce toda la verdad, también quiere saber cómo fue la historia que hubo entre Emiliano y Pepita, fruto de la cual nació Rodrigo.

Pepita, presionada por la situación, pide a Emiliano que sea sincero con Maruja y le revele que realmente, Rodrigo es su hijo. La mujer, al mismo tiempo, sabe que la solución a su problema con Iván pasa por compartir su secreto con Emiliano.

Miguel está feliz, por fin ha logrado la estabilidad con Trini y le propone dar un paso más: buscar a su segundo hijo, dar un hermanito a León… pero ella cree que aún es pronto.